Diseñado desde cero y con el nombre en código F175, el nuevo modelo de ferrari fue apodado “Purosangue”.
“El chasis, el motor y la caja de cambios eran completamente nuevos y la mayoría de los demás componentes habían sido diseñados específicamente para este modelo para convertirlo en un pura sangre”, dijo un directivo de Ferarri.
A mediados de 2018, Ferrari decidió que Purosangue se convertiría en el nombre oficial del modelo, y el entonces CEO Louis Camilleri anunció durante el día del mercado de capitales de la compañía en septiembre de ese año que el automóvil entraría en producción.
Ferarri dice que el nuevo motor V-12 de 6.5 litros produce 715 caballos de fuerza a 7,750 rpm, mientras que el 80 por ciento de las 528 libras-pie de torque ya está disponible a 2,100 rpm.
El Purosangue desarrolla aún más el diseño mecánico que Ferrari introdujo en 2011 con su primer modelo de tracción total, el cupé de cuatro asientos FF, que ahora se llama GTC4Lusso.
Para optimizar la distribución del peso, con un 49 por ciento en la parte delantera y un 51 por ciento en la parte trasera, el motor está montado detrás del eje delantero y la transmisión de doble embrague de ocho velocidades está montada como transeje, detrás del eje trasero.
Una segunda caja de cambios simplificada de dos velocidades, llamada unidad de transferencia de potencia, está montada frente al motor y agrega tracción delantera a velocidades de hasta 124 mph.
Además del sistema de suspensión activa que Ferrari desarrolló internamente en cooperación con el proveedor canadiense Multimatic, el Purosangue cuenta con dirección en las cuatro ruedas para mejorar la maniobrabilidad y el manejo a altas velocidades.
El modelo tiene una velocidad máxima de más de 310 kph (193 mph) y acelera de 0 a 100 kph en 3,3 segundos. Las cifras de consumo de combustible y emisiones se anunciarán cuando se complete el proceso de homologación, dijo la compañía.
Su precio esta estipulado desde 391,000 dólares, y todavía no hay fecha para la llegada a estas costas Americanas.
